Poseedor de una belleza imponente y natural, el Parque Nacional Monte León conforma una de las principales reservas más extraordinarias de nuestra Provincia; no solo por la combinación exquisita de un paisaje sublime con sitios de inconmensurable valor paleontológico.
(Año 1 /Edición Nro. 23 /08 de Diciembre 2014/Provincia de Santa Cruz) Esta maravillosa obra de arte conformada por la naturaleza en su estado puro y por la historia de nuestros antepasados, se sitúa al sudeste de la Provincia de Santa Cruz, sobre la costa del Mar Argentino; a 35 km de Comandante Luis Piedra Buena y a 210 de Río Gallegos, se encuentra esta área protegida de 66.000 hectáreas aproximadamente, las cuales conforman un maravilloso parque en el cual convergen una gran variedad de riquezas biológicas, arqueológicas y paleontológicas en un excelente estado de conservación.
De estancia a Parque Nacional: su constitución histórica
Desde fines del siglo XIX, cuando el Monte León aún era una estancia, este ha sido testigo de diferentes actividades agrícolas-ganaderas; ya que la extracción de guano ha sido considerable hasta 1930 aproximadamente. Posteriormente la familia Braun, quienes representaban a los más prominentes terratenientes de la Patagonia, continuaron con una intensa explotación ovina en estas tierras, hasta el año 2006 estimativamente.
Desde 1997 se había propuesto incluir al Monte León en el sistema de Parques Nacionales, debido a su importante paisaje natural y la belleza única que lo caracteriza; el Ex Director de la Administración de Parques Nacionales de Argentina, recomendó el proyecto a “Conservación Patagónica”, una ONG comprometida con la preservación y la conservación del ambiente natural. Las tierras de la estancia, adquiridas por dicha ONG, son traspasadas a la Fundación Vida Silvestre Argentina, quien compra en el año 2000 la propiedad, con la condición de transferir los títulos a la Administración de Parques Nacionales, teniendo como objetivo fundamental integrar el sistema de áreas protegidas de nuestro país.
De esta manera, una vez que las tierras son entregadas al Estado Nacional por la Fundación Vida Silvestre, con la sanción de la Ley 25.945 en el 2004, se denomina al Monte León como el Primer Parque Nacional Costero-Marino de la Argentina.
Patrimonio arqueológico de la región
Las imponentes tierras de este Parque Nacional constituyen no solo una gran reserva natural, sino que también son el fiel reflejo de nuestra historia Patagónica. Ya que en ellas se inscriben majestuosos acantilados y grutas, así como también pequeñas bahías, playas y restingas con un alto valor paleontológico y arqueológico en donde se han descubierto puntas de flechas, cuchillos, restos de mejillones y ostras, que dan cuenta del uso del territorio por parte de nuestros primeros pobladores, los tehuelches; los cuales, aprovechaban los recursos de los ambientes costeros para vivir de la caza y la recolección.
La “Cabeza del León”, de allí el nombre de dicho Monte, puede visualizarse en un promontorio rocoso que se sitúa en la entrada del camino que conduce a la costa. Este es un solemne acantilado en donde su forma se asemeja a un león americano echado y con su cabeza erguida, constituyendo uno de los principales atractivos del Parque para los turistas. Ya que combina exquisitamente formaciones rocosas erosionadas por el mágico y puro aire patagónico, un cielo que por sus colores se transforma en poesía, y un mar turquesa y transparente que a sus pies constituye una alabanza.
Monte León
Un contacto único con la vida silvestre
Si hay algo que caracteriza al Parque Nacional Monte León, es la diversidad de las diferentes especies que lo habitan. En él se pueden llevar a cabo una gran variedad de actividades, las cuales al encontrarse vinculadas con la naturaleza en estado puro, permiten ser una vía de escape y de recreación para aquellos que deciden adentrarse en una experiencia aventurera alejados del trajín y la cotidianeidad que conlleva la vida en la ciudad.
Monte León Focas
De este modo, constituye el lugar ideal para el avistaje de aves, tales como cauquenes, loicas, choiques, bandurrias y el águila mora, entre otros; así como también la visualización de aves marinas, como cormoranes, garzas, chorlitos, ostreros, pingüinos magallánicos, etc. Por otro lado, los ñandúes, los guanacos y los pumas forman parte del maravilloso paisaje rupestre que conforma la estepa Patagónica.
“La Pingüinera”, que cuenta con más de 75.0000 pingüinos magallánicos que arriban al lugar en diferentes épocas para reproducirse; el Sendero “La Lobería”, el cual muestra la cantidad de lobos marinos al pie de la cabeza del León; La Isla, que posee un mirador en donde se observan sus tres especies de cormoranes, así como también sus extensas playas, en donde se llevan a cabo caminatas y actividades al aire libre, son algunos de los tantos atractivos que posee el parque para los numerosos turistas que arriban a él, en búsqueda de algo más que el contacto con la naturaleza: el encuentro con sí mismos, a través de la combinación de la vida rupestre, la historia y elmajestuoso sonido de la inmensidad Patagónica.
El Parque Nacional Monte León, constituye una maravilla natural de nuestra querida Santa Cruz, que invita al relax y a la tranquilidad, ofreciendo el más cercano contacto con los colores de un cielo mágico, su geografía diversa, y su amplia variedad de especies, así como también incita a vivir una experiencia inolvidable que conecta con el espíritu más puro y rústico de la naturaleza y la historia Patagónica.
Nota del Editor
