Dos historias comparadas de padres de Santa Cruz que han asumido el rol de ser padre y madre. Una historia es de Puerto Deseado y la otra en Gobernador Gregores, ambas vidas son el reflejo de una realidad que se repiten en distintos puntos de nuestra provincia y de la Argentina misma. Los casos que presentamos para la reflexión incluyen el protagonismo del Estado Municipal como portador del valor de acompañar a quienes siendo padres deben buscar inclusión social ante el deber de asumir el rol de un progenitor ausente.
(Año 3 / Edición Nro. 86/ 13 de Marzo de 2017 / Provincia de Santa Cruz)
Han sido solo ellos y sus criaturas en pañales; solos para afrontar lo que se venía: desamparo, soledad e incertidumbre, siempre con la firmeza de no bajar los brazos por más duros que sean los momentos y golpes que la vida les tenía destinado. En ambos casos se trata de empleados municipales que se desempeña uno en tránsito y el otro en cultura municipal.
Ellos miran a sus hijos en la inocencia, en la plenitud de sus ojos, con fuerzas le pelean a la vida para intentar cumplir en el trabajo llevarlos al jardín, al colegio, a sus controles médicos; ahí están “los papis”.
Visiblemente emocionado Alejandro Sandoval (32), nacido en Puerto Deseado, nos relata que desde hace 10 años había solicitado una vivienda, sin saber que en el camino iban a quedarse los tres para afrontar la vida. Algo parecido le ha sucedido a Roberto Roty García de Gobernador Gregores, convertido en músico e intentando trasmitir como parte de la educación hacia sus hijos el placer de hacer música.
Los hijos de Alejandro son Leo de 10 y Kevin de 8 años. Ellos conocen desde pequeños el sacrificio de ver que el padre puede cumplir sueños. Ver sus caritas de felicidad mientras nos reciben en su “hogar propio”, recientemente entregado en el plan de 6 viviendas de Situaciones Especiales, denominado “Plan Vivir Mejor” representa uno de esos sueños.
Tanto él como los nenes no pueden creer el cariño que generan en la comunidad, las muestras de afecto, la valoración del rol que sin dudar asumió sin titubear. Alejandro nos deja un mensaje agradeciendo a todos: “No perder la humildad, a mí me enseñaron a pelearla, sin bajar los brazos… “.
En Gobernador Gregores, una historia similar la viven Valentina y Nahuel, de 9 y 7 años respectivamente. Roberto Roty García (35) afronta la realidad de criar a sus pequeños, todo lo que ello implica: lavar, cocinar, planchar y la atención médica a su pequeña, a quien lleva de manera continua a Río Gallegos por un problema médico de nacimiento.
Este músico local se desempeña formalmente en la Dirección de Cultura dependiente del Municipio, quienes ante esta situación especial, le han brindado el apoyo y contención a la familia. El Estado Municipal le permite ser papá de tiempo completo con sus hijos. Para Roberto este desafío es una bendición. “…mis hijos son un regalo de Dios.”