Año 7 / Edición XXXV / Norte argentino / 23-08-2021 / ISSN 2422-7226
Con intervención del equipo editor del Observador Central
En las primeras salidas tras la cuarentena, el Norte fue una de las regiones más frecuentadas por los turistas.
Después de muchos meses con los números en rojo, los sectores hotelero, comercial y gastronómico recobraron cierta cuota de optimismo después de un año y medio de pandemia.
Según los relevamientos de la CAME (Cámara Argentina de la Mediana Empresa), en los cuatro días previos al feriado trasladable del 17 de agosto, 2.215.570 turistas gastaron en forma directa $ 5.430 millones en los tradicionales lugares turísticos. En total, según la entidad, viajaron 714.700 turistas, 2,1% más que en el mismo fin de semana largo de 2019. Cada uno promedió un gasto diario de $ 2.308 con una estadía media de 2,3 días y un desembolso de $ 3.793,9 millones en forma directa, 61% más que en 2019. A esto se suman los 1.500.870 excursionistas que se desplazaron de una ciudad a otra a pasar el día con una erogación promedio de $ 1.090 per cápita. En este caso, se estima que gastaron $ 1.636 millones en forma directa. «Hubo mucho viaje intrafamiliar, a visitar vínculos o compartir festejos por el día del niño. La fecha se notó además en la demanda gastronómica», señaló CAME en un comunicado.
El Norte argentino terminó siendo una de las regiones más concurridas, con niveles de ocupación al 100% en algunas ciudades. La región Sur, en cambio, se vio afectada por la cancelación de vuelos.
Si bien, este fin de semana largo que figura en el calendario anual, tras las vacaciones de invierno suele reportar un movimiento más moderado, los resultados en varios destinos turísticos superaron las expectativas, coinciden los referentes del turismo.
Según Gustavo Hani, presidente la CAT (Cámara Argentina de Turismo), “este fin de semana largo significa un paso más que estamos dando para la reactivación. Es muy importante porque nos indica que se está restableciendo la confianza por viajar. Y la demanda sigue en ascenso”, señaló. La excepción se da en los hoteles de la ciudad de Buenos Aires, que siguen manteniendo niveles críticos y tardarán en reactivarse, reconocen en la CAT. En cambio, “desde la gastronomía se percibe una luz de esperanza. Había una demanda contenida, y ahora con un mayor grado de apertura observamos que empieza a mejorar”, detalló Camilo Suárez, presidente de CAT Baires. “De a poco estamos volviendo a trabajar, recuperando el tiempo perdido. De esto se habla en todas las provincias y en cada destino. Este fin de semana largo dejó en claro que podemos seguir adelante. Y con herramientas como el PreViaje, entendemos que vamos por un buen camino de cara a las vacaciones de verano”, concluyó Hani.
Otra característica del fin de semana fue la tendencia de viajes de cercanía a destinos con fuerte impronta de naturaleza y turismo activo. En esa misma línea, provincias como Entre Ríos, con una propuesta de turismo termal, también se vieron beneficiadas, según la entidad.
Entre los destinos invernales típicos, para quienes optan por la nieve, Ushuaia se destacó por los niveles de ocupación. “Estamos teniendo un gran movimiento de turistas desde mediados de julio y tenemos excelentes perspectivas para lo que resta de agosto”, señaló Ángel Brisighelli, presidente de la Cámara de Turismo de Ushuaia.
Desde CAME, agregaron además que otro indicador sobre la actividad turística del fin de semana pasado, fue el abultado tránsito que se hizo evidente el viernes. Ese éxodo de los automovilistas derivó en el colapso de varios de los puntos de acceso a la ciudad.
Fuente: Portal de noticias web “Clarín” – 18/08/2021