Situados al Sur de la Provincia del Chubut, comprenden unos de los mayores atractivos para turistas, visitantes locales y poblaciones aledañas de la región. No solo por la belleza natural que los caracteriza, donde sus aguas cristalinas junto con el mágico cielo Patagónico comprenden un majestuoso paisaje, sino también porque su preservación es sustancial dado que comprenden uno de los principales recursos estratégicos para el desarrollo económico y poblacional de la región.
(Año 1/ Edición Nro. 48/ 01 de Junio de 2015/ Provincia de Chubut). Los Lagos Musters y Colhué Huapi son dos oasis en la Estepa Patagónica situados al Sur de la Provincia de Chubut, conformando la fase terminal de la Cuenca Endorreica del Río Senguer; ambos se encuentran, además, en la zona denominada Gran Bajo de Sarmiento, donde se halla el Valle de nombre homónimo.
El Lago Musters, el cual antiguamente era denominado “Otrón” por sus antiguos pobladores de etnia tehuelche, debe su actual nombre a George Chaworth Musters un Italiano de descendencia inglesa que recorrió la Patagonia de un extremo a otro acompañando a grupos Tehuelches de los Caciques Orkeke y Casimiro Biguá; mientras que el nombre del Lago Colhué Huapi, proviene de la lengua mapuche, en donde “Colhué” significa “lugar rojo, o rojizo”, debido al color arcilloso de sus tierras que le otorgan esa coloración al agua, y “Huapi” hace referencia a una isla.
Ambos lagos se encuentran separados por una porción de terreno de aproximadamente 695 mts. sobre el nivel del mar, y unidos a su vez por un brazo del Río Senguer denominado como “Falso Senguer”. Por otro lado, si bien estos dos espejos de agua son alimentados por el Río del mismo nombre, sus características físicas son bien diferentes en lo que a extensión y profundidad se refiere.
Ya que el Lago Musters, debido a su profundidad de 40 o 50 mts. y su extensión de 450 km2, no solo posee un majestuoso color azul intenso en sus aguas, sino también una gran biodiversidad de especies, que lo hacen protagonista de un importante atractivo para la provincia y la región. Mientras que el Lago Colhué Huapi, se caracteriza por ser de escasa profundidad, con aguas turbias, y con una costa fangosa de agua y tierra que dificulta el acceso a este para la explotación turística, pero no deja de ser importante en lo que a su diversidad y conservación de especies se refiere.
Diversidad que despierta los sentidos
Estos espejos de agua, disímiles y a la vez tan parecidos entre sí, comprenden un escenario en donde la naturaleza muestra su mejor faceta; la soledad que los caracteriza, el azul penetrante de sus aguas que bañan las costas, el cielo como testigo, y la biodiversidad de especies se conjugan para ofrecer una gran variedad de actividades que no solo permiten un encuentro ínfimo con lo natural en estado puro, sino también el encuentro con nosotros mismos.
En ellos se pueden llevar a cabo actividades deportivas y náuticas, que incluyen la pesca de gran variedad de truchas (arco iris, marrón, entre otras), percas, y pejerreyes, especies autóctonas y exóticas de gran calidad y tamaño. Por otro lado, puede desarrollarse la pesca comercial, así como también la navegación en vela, en kayak, entre otras actividades náuticas.
Asimismo, los turistas y visitantes locales y regionales, también podrán disfrutar de caminatas al aire libre, con el paisaje del majestuoso lago como testigo, permitiéndoles compartir un momento sereno en familia y con quienes más queremos.
Sus diversos usos: un lugar para proteger y preservar
Estos lagos no solo son esenciales por su abundante población ictícola y por el paisaje natural en sí mismo que conforman sino también porque, debido a sus características, son recursos importantes para el desarrollo estratégico de la región. En primer lugar, porque a partir de ellos se incentiva la actividad turística en la misma; en segundo lugar, el Río Senguer, antes de desaguar en el Musters, es proveedor de una gran cantidad de metros cúbicos de agua que abastece a las actividades agrícolas de la región, con la finalidad de mantener las condiciones óptimas de riego en periodos de sequía (Tejedo, A.; 2003). En tercer lugar, las operadoras petroleras extraen agua del Senguer para el proceso de recuperación secundaria en los pozos con el fin de incrementar su producción; finalmente y en cuarto lugar, el caudal del Lago Musters, se aprovecha para abastecer de agua potable a las localidades de Comodoro Rivadavia, Sarmiento, Rada Tilly y Caleta Olivia, mediante el Acueducto Jorge Carstens, más conocido como “Acueducto Lago Musters”.
En relación a lo anteriormente mencionado, tanto los usos “directos” aquellos vinculados específicamente al Lago Musters, como los usos “indirectos”, aquellos provenientes del Río Senguer, inciden en el caudal tanto del primero como del segundo, así como también del Lago Colhué Huapi. Ya que desde el año 1998, aproximadamente, se puede evidenciar un déficit importante en los caudales de estas masas de agua, incrementando la degradación de la región y de las distintas actividades que en ella se desarrollan.
Sabemos, sin caer en reduccionismos, que más allá de las acciones antrópicas, el déficit de estos espejos de agua se debe a sus características particulares y naturales, como su fuerte proceso de evaporación por la acción eólica o la radiación solar, a la escasez de lluvias y de humedad ambiental, entre otras cosas; pero no podemos dejar de tomar conciencia, que “a medida que las condiciones del Lago se vuelven más extremas, por desecamiento progresivo y concentración de sales, la biomasa del zooplancton aumenta y disminuye su diversidad” (Marinone; 1994).
Por esta razón, para que estos oasis continúen siendo escenario de la multidiversidad y de la naturaleza en estado puro, se requieren acciones estratégicas que no terminen profundizando la sequía caracterizada por los efectos naturales. Acciones estratégicas que incluyan un concepto de trabajo colectivo y desarrollo endógeno, para que no solo sus pobladores locales y regionales, visitantes y turistas puedan disfrutar de los mismos, sino también, las generaciones futuras y aquello que está por-venir.
Por el Equipo Editor de Observador Central.