Año 7 / Edición LII / Santa Cruz / 20-12-2021 / ISSN 2422-7226
Por el Equipo Editor del Observador Central
Dentro del deslumbrante rubro de la moda, podemos encontrarnos con más dudas que certezas respecto de los medios por los cuales las grandes corporaciones se hacen de las materias prima necesarias para la fabricación de sus productos, es bien sabido el hecho de que el proceso de producción y confección de ropa es uno de los que mayor repercusión tiene a nivel ambiental, y no precisamente en un buen sentido. Por este motivo Stand Earth, la organización dedicada a proteger el medio ambiente que transformado la política corporativa y las leyes gubernamentales en los Estados Unidos y Canadá, ha elaborado un informe que vincula a más de 50 marcas relacionadas con la industria de la moda (entre las que destacan varias de renombre internacional) a la deforestación del Amazonas.
La industria del cuero ocupa un rol de gran relevancia en el territorio brasilero, llevando a la deforestación ilegal para esparcimiento de la industria ganadera, las empresas mencionadas en dicho informe poseen conexiones con proveedores de cuero originarios de esta zona. Entre las marcas que se mencionan en la lista podemos encontrar: Zara, Adidas, Nike, Lacoste, GAP, Fila, Puma, Vans y Calvin Klein.
Cabe destacar que durante los años 2019 y 2020 el gobierno de Brasil fue duramente criticado por líderes de todas partes del mundo por su falta de medidas en torno a los incendios forestales acontecidos en el Amazonas, los cuales según lo apuntado por entidades ambientales y comunidades nativas, son ocasionados intencionalmente con el propósito de incrementar los territorios disponibles para la ganadería.
Entre las declaraciones dadas por personal de la empresa, se destaca la de Greg Higgs, uno de los investigadores involucrados en el informe, quién aseguró que “Los hallazgos son sorprendentes, porque varias de las marcas encuestadas han anunciado recientemente políticas para desenredarse de los actores a lo largo de la cadena de suministro que contribuyen a la deforestación. La tasa de deforestación está aumentando, por lo que las políticas no tienen ningún efecto material”.