Puerto Deseado, 15/09/2014. Miryam Alonso no es la típica esposa de un exitoso empresario. De hecho es una emprendedora en sí misma. Además es madre y, por si fuera poco, es la presidenta del Honorable Concejo Deliberante de Puerto Deseado. Lo que se dice, una mujer con iniciativa y vocación para cada tarea que encara en el día a día, tanto en el ámbito privado como en la esfera pública.
Demostrando un compromiso impostergable para con sus tareas como funcionaria al servicio de la localidad costera, Alonso siempre ha estado cerca de sus vecinos, antes desde su rol de madre y activa participación en comisiones de padres, y ahora como concejal. Lo cierto es que, sea donde sea que la realidad la encuentre, la obsesión es una sola: “Si no sigo en política obviamente seguiré trabajando para mi comunidad a través de alguna otra entidad”, manifestó con seguridad.
“Yo creo que a la gente no hay que marcarle falsas expectativas. Muchos vienen por el tema de la falta de trabajo, en este momento hay una determinada brecha de chicos que no lo tienen”, comentó Alonso. “Dentro de los lugares que tenemos en Puerto Deseado tratamos de dar una solución”, completó sobre los jóvenes, protagonistas de uno de los temas que más la apasionan y han marcado su gestión: la educación, en particular en nivel superior. En sus dos periodos, la concejal acompañó diversas propuestas orientadas a este campo, entre las que se contaban el plan de estudio de Pedagogía y Educación Social, y la solicitud en junio de este año al Instituto Provincial de Educación Superior (IPES) para traer las carreras de Profesorado en Matemáticas y la Tecnicatura en Recreación y Deporte para el año 2015.
Pero más allá de que la educación sea una de sus principales inquietudes, esto no quiere decir que la funcionaria se mantenga ajena a otras cuestiones, como la llegada de la minería a Puerto Deseado, uno de los temas que más le quita el sueño a la comunidad.
“Desde 2009 que están tratándose los mismos puntos, como por ejemplo, la capacitación de proveedores. Si se hubieran hecho bien las cosas, hoy tendríamos proveedores totalmente capacitados y a la altura de las circunstancias, pero el tiempo se perdió. Y ahora exigen que nuestros comerciantes estén capacitados. Si no lo están, ¿Indudablemente van a venir de dónde? De afuera, y bienvenidos sean si son de Santa Cruz, pero la verdad yo prefiero que sean de mi localidad. Debería respetarse el orden primero Deseado, luego Santa Cruz y después el resto. Yo no creo que se vaya a respetar y eso es lo que me molesta”, profundizó Alonso que, sin duda, marcó terreno acerca de cuál será su posición respecto a esta problemática en particular.
Una vida política de lealtad hacia las ideas
“Si me tengo que calificar creo que con un 7 estoy bien, pero no pienso que eso lo tenga que contestar yo, sino la comunidad. Soy una persona que me preocupo y me ocupo de lo que la gente viene a diario y me plantea, pero sería vanidoso decir que mi desempeño califica con un 10; yo estoy conforme y creo que estoy llevando bien a cabo esta tarea”, reflexionó sobre sus dos periodos en el cargo. como uno de los actores más importantes del ámbito político deseadense.
Alonso llegó a iniciarse en el mundo de la política deseadense en el año 2007, de la mano del actual intendente Luis Ampuero, de quien hoy se muestra distanciada en cierta medida. “Él ha tomado una participación más directa con el gobierno provincial, no juzgo la manera en que lo ha hecho o como lo ha hecho. Yo creo que lo que hubo fue una discusión por temas en los que yo pensaba de una manera y el señor intendente de otra. Obviamente, como seres humanos, eso produce un enojo”, aclaró sin titubear.
Es que su compromiso, más allá de los proyectos, es con las ideas, porque sobre ellas se sientan los planes de acción de una funcionaría que nunca pierde de vista que los principales beneficiados de su gestión deben ser los vecinos, aún cuando eso signifique distanciarse de viejos aliados y redunde en ser atacada por ello, casi hasta el punto de acusarla de traición. “Desde el entorno del intendente se ha comentado que yo me alejaba para acercarme a otro sector, pero yo creo que todos entramos bajo una misma bandera que es la de la presidenta de la nación. Uno puede estar enojado o molesto con alguno de los compañeros, pero no podemos desconocer que estamos todos por el Frente Para la Victoria (FPV) y es la bandera que en su momento, cuando hubo elecciones, representamos y que obviamente yo aún hoy represento”, dijo Alonso y se mostró conciliadora, aunque siempre firme en su postura: “Yo creo que fue una interna política más que un alejamiento. Como adultos que somos las asperezas de este tipo se hablan. No me he peleado con el señor intendente municipal, tengo una relación de concejal a intendente siempre con educación, y con respeto. Él sabe que me ha dado la posibilidad de entrar en esto y yo siempre digo que le agradezco, pero bueno, al margen de haber entrado por su apoyo también uno tiene diferencias y criterios distintos, y yo creo que lo que uno prioriza siempre es estar del lado de la gente”.
Buscando construir un futuro sobre las bases del presente
“- ¿Vas a ser candidata a intendente?
– Yo creo que a todos los que estamos en política nos gustaría”.
Las palabras son de Myriam Alonso que, sin embargo, no duda en poner un freno a sus dichos, porque si hay algo a lo que la Presidente del Concejo no responde, es a los impulsos, esos que en cualquier otra persona harían estragos pero que deben estar medidos en cualquier funcionario político que se precie de ser tal: “A mí me gustaría, eso no quiere decir que mañana o pasado digan ‘Alonso va a ser intendente de la localidad’. Creo que hay que seguir armando cuadros, trabajando y viendo que es lo que quieren los demás, no largarte por decir ‘quiero serlo’. Habrá que esperar a ver qué pasa”, remarcó la potencial candidata que no mostró dudas respecto a seguir bajo los lineamientos del gobierno nacional, “un proyecto más grande y sobre todo de inclusión”.
Por Gustavo Alegre para OBSERVADOR CENTRAL