(Año 4/ Santa Cruz/ 19-05-2019/ ISSN 2422-7226)
En el video que difundió el Obispado loca, se lo escucha decir: “Queridos hermanos, querido pueblo de Dios de la diócesis de Río Gallegos, quizás en San Julián el cura que celebró aquella misa hace 500 años no sabía que estaba sembrando algo histórico, algo muy grande. Y ustedes están conectados, son descendencia de aquello, de la primera misa en nuestro territorio, prepárense bien”.
Además, sugirió que «miren al costado al que está peor que ustedes, lo buscan y lo ayudan”.
También pidió que «no pierdan la alegría, porque donde hay alegría está Dios» y remarcó que «no tengan el corazón funebrero, tengan un corazón alegre, aún en las tristezas, que la alegría es esperanza de Dios».
Al finalizar, hizo un pedido a sus fieles: “recen por mí”.