(Llegan a su banca legislativa por su legitimidad social o por la boleta de un Intendente, luego si se les ocurre tener pensamiento propio tendrán la guerra, otros el deshonor)
Caleta Olivia, 29/09/14. Los Concejales supieron ser vecinos que por su honorabilidad eran elegidos para representar los intereses de los distintos sectores de las comunidades. Con el tiempo, entre las interrupciones democráticas, y formas de hacer política local y provincial, la Institución del Honorable Concejo Deliberante se ha transformado en un ámbito estatal de bajo reconocimiento social. Muchos legisladores siguen siendo elegidos por honorabilidad o legitimidad social o simplemente arrastrados por una boleta de un Intendente ganador. Esta última opción se transforma en “una manzana envenenada” cuando se les exige ser escribanía y comienzan a ser ahogados en su autonomía económica e institucional. Al estar sometidos políticamente al Tribunal de Cuentas de la provincia, al humor de los Intendentes locales y al “Poncio Pilatos” del tribunal superior de justicia, evidencia que su rol histórico parece estar en crisis.
De honorables a “Ordinarios”?
Un chiste de Facebook en una comunidad del Norte de Santa Cruz, narra la imagen que construye la ciudadanía de hoy sobre los cuerpos legislativos locales. El breve cuento que vamos a reproducir puede ser aplicable a cualquier realidad que usted pueda conocer. En un Facebook local, alguien anuncia: “mañana a partir de las 10.30 reunión Ordinaria del HCD de…” a lo que el comentario de un lector comenta:”… ¿Ordinaria cómo siempre?”. Este breve cuento muestra parte del deterioro de la imagen de la Institución en la que muchos vecinos llegan con la mejor intención de representar partidos, acompañar propuestas, gestionar por una mejor calidad de vida para su Comunidad, y terminan siendo la burla de ella por ser desvalorizados en sus funciones por sus propios Intendentes y en la que varios locutores de programas mediáticos se hacen eco de esta construcción de opinión pública.
Principios que son sólo un recuerdo cuando el poder local ya no existe
Desde la Revolución Francesa a finales del siglo XVIII, los principios de división de poderes entre Ejecutivo, Legislativo y Judicial, se replicaron por todo occidente como forma de garantizar la correcta representación y resguardo de derechos individuales y colectivos DE LOS CIUDADANOS. Hoy en todo el mundo se sabe que la representación de poderes locales, incluido el de los Estados Nacionales se encuentra en crisis. Más aún, con el advenimiento de la globalización, los ámbitos de poder real que gobiernan el mundo y nuestras instituciones cada vez más dependen de la economía externa. Así las cosas, el poder económico puede estar localizados en accionistas de distintas partes del mundo nucleados en una corporación que no tiene jurisdicción nacional y que actúa a través de apoderados locales. Mientras esta realidad existe aquí en Santa Cruz Norte, las instituciones como los Concejos Deliberantes se debilitan en calidad y fuerza de representación. En nuestra provincia, este debilitamiento que todos saben y nadie asume como problema constitucional e institucional, es reforzado por la denominada Ley 55 que organiza los funcionamientos de los HCD y la Ley 760 Cordada 54 que organiza sus actos administrativos contables. Ambas Leyes parece que han inmovilizados y petrificados el accionar de los poderes legislativos locales, y supeditando su funcionamiento al humor del gobernador de turno, a las representaciones oficialistas y radicales que participan del Tribunal Superior de Cuentas y/o a los Intendentes que restringen la autonomía presupuestaria y poder de comunicación de las legislaturas. Mientras esto ocurre, paradójicamente la justicia provincial se lava las manos aduciendo que el poder legislativo tiene autonomía.
Vigilar los actos de los Intendentes
La unificación política en tensiones que desgastan el tiempo institucional es posible de encontrarla en cada ciudad del Norte Santacruceño. Así, en Puerto Deseado desde la Presidencia del Concejal Rapetti y la actual Alonso, el Concejo ha cobrado un poder político inusual al intervenir el cuerpo unificado en los grandes temas de la comunidad como agua, minería, seguridad y abandono de los temas públicos por el intendente. En Caleta Olivia, Chamorro, Acuña Kuns, Aybar y Naves, han denunciado expresamente la no gobernabilidad del municipio. El reciente pedido de destitución del Intendente de dicha localidad, por insania y falta de deber de funcionario público culminó en un círculo vicioso que mostró una red de protección legal organizada desde el sistema político. Aquí quedo en evidencia que el Gobernador de la Provincia mostró una vez más que el Intendente de Caleta Olivia puede depender económicamente del estado Nacional, pero políticamente de su “pulgar”. En Pico Truncado, la transparencia de los actos del Intendente en su carrera de ser Vicegobernador de Daniel Peralta, unifican la agenda de los ediles de todas las extracciones; en Las Heras, el conflicto de poderes con el Intendente reúne el juego político del gobernador y el propio achicamiento que el Intendente Camino le prolifera su principal adversario interno Osnovirk; en Perito Moreno: el remplazo del Estado por la Corporación Goldcorp ha puesto de manifiesto la preocupación de los ediles en la forma personalista de Mabel García en pretender negociar directamente con Goldcorp sin considerar al poder legislativo en los reclamos de sustentabilidad minera; en los Antiguos, el viejo Caudillo Sandoval genero una política de distribución clientelar de tierras indiscriminada que no logra resolución a favor de la productividad y hoy el organigrama institucional ha dividido el Concejo por ampliación de puestos políticos que fracturó al bloque radical.
Las agendas particulares en las comunidades de Zona Norte
Como contrapartida a los límites de la política y de las leyes que organizan su funcionamiento perimido, todos los concejales coinciden en señalar que buscan junto con ser un contrapeso a los poderes ejecutivos, ser receptores de los grandes problemas de sus vecinos: Así en Puerto Deseado, la agenda incluye desde la salud, la asistencia social, seguridad y la extracción minera y pesquera, hasta la gestión de servicios sociales básicos ante la ausencia de un servicio social eficiente; en Caleta Olivia, la agenda incluye desde la gobernabilidad del municipio hasta la carencia de agua y los problemas de seguridad y drogadicción; en Pico Truncado la salud y el agua potable forma parte de la agenda que los unifica; en Las Heras, el conflicto de poderes con el Intendente organiza la agenda diaria; en Perito Moreno, el remplazo del Estado por la canadiense Goldcorp y el desmantelamiento del sistema de salud local y los servicios básicos como gas, red cloacal, la política de Responsabilidad social de donar cepillos de dientes y perros para control de drogas, la exclusión de jóvenes del mercado de trabajo local, la inacción de la agencia de desarrollo local, la segregación entre barrios residenciales para ejecutivos y población residente marcan una nueva división de estatus introducida por la cultura de la minera Goldcorp. En los Antiguos, la venta sistemática de Chacras a capitales extranjeros para proyectos inmobiliarios y el retroceso de la frontera agraria, esta eliminando la tradición productora, e incrementando la preocupación ante la desprotección de la zona de frontera, dado el desmantelamiento paulatino de la Gendarmería mientras que la preocupación ambiental por la minería en Perito Moreno sigue siendo tema de agenda y simultáneamiente, los jóvenes Antiguenses van a las minas a trabajar.
Agendas comunes materia de preocupación legislativa
Todos los ediles, hombres y mujeres, de extracciones peronistas o radicales comparten en común su preocupación por el flagelo de las drogas en la juventud, la seguridad, y salud asociada a falta de profesionales, los problemas de infraestructura escolar, la falta de infraestructura urbana producto del crecimiento asociado al modelo productivo de la zona, así como también la falta de planificación prospectiva y de información institucional para tomar decisiones acertadas para la comunidad. Comparten también en común una tendencia que los supera en la Ordenanzas vigentes cuando los ejecutivos locales entregan lotes urbanos sin servicios para luego tener que absorber nuevas demandas en las que los presupuestos públicos no existen. Todos ellos se sienten atrapados en el modelo de redistribución de coparticipación y declaran como idea sustancial intentar generar la defensa de un modelo de redistribución de la renta minera metalífera que no repita el modelo extractivo hidrocarburífero. En muchos casos sienten que las leyes de Provincia sólo buscan extraer beneficios de los recursos naturales depositados en el subsuelo de zona norte. Del mismo modo, todos comparten el sentimiento de “avasallamiento” que proviene de sus propios ejecutivos del estado y del poder económico de las pautas publicitarias que usan los intendentes en ciertos programas mañaneros para colocarlos como actores de una escena de comedia cuando de ridiculizarlos se trata.
Oficialistas y no oficialistas se unifican en un concepto: Vigilar los actos de los Intendentes
La grilla política de cómo llegaron al HCD cambia sustancialmente a partir del primer año de ser legisladores. El alejamiento deviene en la mayoría de los casos de sentirse que se les pide sean “escribanos” de actos reñidos con la función de control que deben ejercer sobre presupuestos, organigramas y licitaciones. Los concejales de Zona Norte, con independencia de su extracción partidaria, todos reconocen una suerte de aislamiento y de NO vinculación de trabajo con Intendentes y/o diputados por pueblo. Estas autoridades que naturalmente deberían coordinar una agenda legislativa de alcance territorial simplemente miran para otro lado. Los Concejales asumen que establecen vínculos personales con el Gobernador, Vicegobernador o Diputados provinciales y nacionales, senadores, para buscar algún asesoramiento específico, así como también algunos recursos económicos para llevar adelante alguna de sus agendas de gestión política o protección política frente a sus intendentes cuando son de la misma extracción partidaria.
La Cámara de Diputados de la Provincia de Santa Cruz tiene la palabra
La opinión pública republicana tiene pendiente al menos en la franja norte de Santa Cruz, asumir que por boleta o por honorabilidad o la combinación de ambas fórmulas, nuestros vecinos se transforman en nuestros representantes para crear Ordenanzas, Resoluciones, adhesiones, etc. La Legislación genera bases para proteger los derechos colectivos e individuales de los ciudadanos que luego pueden transformarse en jurisprudencia. De allí que deslegitimizar el rol del Concejo Deliberante es contribuir a debilitar aún más al Estado. Observador Central comenzó a dialogar con los ediles de todas las extracciones y evidenció el agotamiento, el cansancio, las carencias materiales y salariales para cumplir dignamente el rol que la democracia les asigna con el voto ciudadano. Hoy, en la Cámara de Diputados de la provincia la situación institucional de Caleta Olivia, de Las Heras, 28 de Noviembre, Gobernador Gregores y próximamente Río Gallegos trasladará a ese recinto la discusión de la Ley 55 y la ley 760 cordada 54. Dependerá, pues de este poder legislativo provincial, profundizar la crisis de representación de los Concejos o prescindir de lo político y priorizar el Estado.
Por Ignacio Guillotín para Observador Central